lunes, 29 de agosto de 2011

Benedetti para disfrutar y de paso pensamos en gramática

Sugerido por Marcia Rodríguez

TU ESPEJO ES UN SAGAZ de Mario Benedetti

Tu espejo es un sagaz
te sabe poro a poro
te desarruga el ceño
te bienquiere
te pule las mejillas
te despeina los años
o te mira a los ojos
te bienquiere

te depura los gestos
te pone la sonrisa
te transmite confianza
te bienquiere

hasta que sin aviso
sin pensarlo dos veces
se descuelga del clavo 
te destroza.


  • Identificar las funciones de “te” y de “se”.
  • ¿Qué indican esos “te”(quién ejecuta la acción y sobre quién) en contraposición con el “se”? Analizar la relación de poder que se expresa en el texto. 

Interpretaciones de la poesía


En el poema se ve una clara intención de "amigarse con una misma". Cuando comienza hablando de su propio espejo y nos dice "tu espejo es un sagaz ", hace referencia a que de manera astuta pero sutil trata de descubrir lo oculto de las cosas, de “sus "cosas”. Luego en el segundo verso cuando dice" te sabe poro a poro" es porque quiere develar el secreto (quitar los velos) para buscar en su interioridad lo oculto, eso que ella esconde o no deja ver...pero poco a poco,  despacio...
“Te desarruga el ceño, te bienquiere” es decir la saca de su enojo, para amigarla consigo misma, para que se permita quererse.
Te pule las mejillas, te despeina los años”: la hace quererse, complacerse, satisface su necesidad de sentirse bella...
Te mira a los ojos” y con esa mirada hacia sí misma que connota un marcado rasgo de profundidad, sinceridad y  franqueza, le pide que se vea, que se acepte, que se quiera.
“Te despeina los gestos, te pone la sonrisa”, es decir,  le saca la cara de amargura y la hace sonreír porque eso que ve en efecto le agrada.
“Te transmite confianza”,  te dice sí!! sos vos!! sos eso que se refleja y te gusta!!podés sentirte segura de vos misma permitítelo!!!
“Hasta que sin aviso, sin pensarlo dos veces, se descuelga del clavo” esta última frase me hace pensar o sentir que todo lo expresado con anterioridad se cae...porque forma parte de un mundo ficticio-irreal y que esa realidad es lo que como dice la última frase la destroza!!!
María Laura Muñoz-Pérez

Cuando el poema dice " tu espejo es un sagaz"  se puede leer la voluntad de expresar el carácter  observador, frío y sentencioso del espejo, desde su inquietante rigidez; una sagacidad capaz de leerle con anticipación el pensamiento a quien se aproxime. Por otra parte, cuando dice " te bien quiere", se puede pensar que subyace a lo dicho antes, la idea de que ese espejo permite pensarse idealmente a sí mismo, autoevaluarse, y proyectarse tal vez. Cuando dice "se descuelga del clavo" " te destroza"  da lugar a interpretar que ese clavo es un nexo entre la fantasía en la que navegaba ilusoriamente él, o ella,- en la bruma de la inconsciencia-   y lo terrenal; un nexo que se interrumpe destrozándose por el ajetreo de la realidad,  la  realidad a la que retorna inevitablemente ese sujeto que miraba en el espejo de su razón. 
Luciano Barroso


“Te sabe poro a poro” es que conoce profundamente a la persona que es su dueña, “te bienquiere  interpreto que aún la quiere , “te pule las mejillas” que le saca lo que no es bello , “te despeina los años” interpreto que le desacomoda la edad, haciendo que a veces sea más joven su exterior, “ te mira a los ojos” significa que le dice la verdad, “te depura los gestos” adivina su pensamiento, lo perfecciona a causa de que es intuitivo y clarividente,  “te pone la sonrisa” la alegra,  “te transmite confianza” le otorga seguridad,  “hasta que sin aviso” con una gran rapidez, sin haber advertido su proceder,  “sin pensarlo dos veces” sin dudar, “se descuelga del clavo” se sale de su lugar, cambia, se transforma, “ te destroza” la hiere.
Según mi apreciación la poesía puede interpretarse como que el espejo refleja los miedos propios de la mujer: dejar de ser bella y joven,  ser expuesta en su esencia, olvidarse de sonreír,  de ser feliz aceptándose tal cual es.
Con la última estrofa interpreto que cada uno de sus temores se convirtieron en su realidad haciéndola muy desdichada.
Sin embargo la poesía de Benedetti también me sugiere que la figura del espejo es un hombre (su esposo) que la conoce a la perfección porque convive con ella hace ya tiempo, que quizás en sus desacuerdos la fastidia, pero la ama. Con su amor la embellece, la hace sentir joven y vital, al mirarla a los ojos le dice que la ama. Tanto la conoce que le adivina los gestos, le produce alegría y le da seguridad porque ella sabe de su amor. Hasta que el amor se le termina, la deja sin dudarlo y con su partida la mata.
Laura Carrizo



Interpreto que es el espejo, tu espejo, quien posee el poder y la astucia de conocerte por completo. El dueño de reflejarte como vos necesitás, lleno de juventud y sin arrugas. Te procura  la calma y la sonrisa. El mismo que cada día te enfrenta a los ojos y te da la confianza que siente  que has perdido. Te quiere bien, es tu amigo, te ama. Sin  embargo  un día cualquiera, con el mismo poder que usó para adularte y sin que te des cuenta, "se descuelga del clavo", se cansa, te baja a tierra, te refleja como eres y te aniquila.  
Marcia Rodríguez 

Cuando nos paramos frente al espejo lo hacemos para vernos, es nuestro reflejo que intentamos cambiar, nos maquillamos y peinamos tal vez para quitarnos unos años de encima o sentirnos hermosas. De esa forma nos sentimos bien con nosotras mismas y eso nos transmite confianza.
 
Sin embargo hay otras ocasiones en las que no nos conformamos con lo que somos, con nuestro reflejo,  entonces “se descuelga del clavo, te destroza”. Ese espejo, ese reflejo está representando nada más ni nada menos que la condición del ser humano, este estado  de nunca conformarnos. 
Tal vez eso que vemos en  él, no sea nuestro reflejo, sino el reflejo de una  sociedad que de alguna forma nos persuade para que sigamos ciertos modelos, ciertos reflejos ajenos.
Lorena Gabutti



jueves, 25 de agosto de 2011

Y seguimos armando un corpus

Canción de amor propio - Letra y música: Ismael Serrano
Sugerida por María Laura Muñoz-Pérez


A veces me desdoblo y me digo al oído: 
"¡Qué bueno respirar, sentirte vivo!
 
¡Qué bueno que te cruces por mi camino!".
 
Rodeado de un espejo circular,
 
soy feliz con esta esquizofrenia tan particular.

¡Qué grato es encontrarme vaya donde vaya! 
Por más que me cuento mis chistes
 
siempre me hacen gracia.
 
Si me voy, si me duermo, la vida se apaga.
 
¡Qué potra saber que siempre me seré fiel!
 
¡Qué suerte desde un principio caerme tan bien!

Y voy y me levanto cada mañana, 
feliz y seguro.
 
Me hago el desayuno,
 
me lo sirvo en la cama,
 
y allá voy,
 
menudo soy,
 
me dedico un arrechucho:
 
sexo seguro,
 
sin riesgos, sin contemplaciones,
 
dudo que nada me satisfaga mejor que un servidor,
 
menudo soy para el amor.
 
Y qué le voy a hacer si la gente
 
me condenó al olvido, a ser autosuficiente,
 
si con eso sobrevivo, que no es poco,
 
mejor loco que mal acompañado.

¡Qué bonita, qué divertida es conmigo la convivencia! 
¡Descojonarme de mi última ocurrencia!
 
Y esperarme despierto, vuelva a la hora que vuelva,
 
o cocinar para mí mi plato favorito,
 
no encontrar en el baño más pelos que los míos.

Sólo yo controlo, sólo yo determino, 
mis hábitos de higiene.
 
Lloro en mi hombro cuando nadie me entiende.
 
Si me siento solo miro a la luna,
 
me juro amor eternamente.


Observar el uso del pronombre “me” para indicar acción refleja y la interpretación que ese uso sugiere.



martes, 23 de agosto de 2011

A propósito de casarse

Hay una frase que solemos decir a menudo: 
Yo no me caso con nadie.
¿Cómo analizarías sintácticamente el predicado? ¿Por qué?

Un texto para compartir


Matías Caruso envió la letra de esta canción:

Me amoCuarteto de Nos

Me encanta mi aspecto
de hombre tan perfecto
yo soy lo más grande que hay.
Ni de sabios ni de viejos
acepto consejos
mi único rival es el espejo.

A la luna me gustaría ir
para ver cómo es el mundo sin mí.
Me amo, como la tierra al sol.
Me amo, como Narciso soy
me amo, dibujé un corazón
que dice "yo y yo"
me amo.

Tengo tantas chicas
hermosas y ricas
pero ninguna es digna de mí.
Por eso no ando dejando corazones rotos,
me masturbo mirando mi foto.

Y aunque yo no creo en ningún dios
rezo para que no haya reencarnación.

Me amo, como la tierra al sol.
Me amo, como Narciso soy
me amo, dibujé un corazón que dice "yo y yo"
me amo.

Yo me llevo solo bien conmigo
yo del mundo soy el ombligo
de mi vida yo hablo mucho
y cuando me hablan yo nunca escucho.
Soy de mi propia secta
soy mi pareja perfecta.
Y sí, yo soy así:
propongo un brindis por mí.

Y  este es el link del video:

  • Pensar  por qué razón esta  canción podría integrar un corpus junto con “Canto Nupcial”.
  • ¿Qué diferencias en cuanto a lo gramatical hay? Por ejemplo: me casé, ¿es un verbo que puede ser reflejo? ¿Y “me amo”?
  • ¿Qué connota la repetición de “me amo”? ¿Cómo está construido ese “yo lírico” que habla en la canción?

jueves, 18 de agosto de 2011

¿SÉ CUÁL ES ESE "SE"?

Leé los ejemplos y ponete a prueba, ¿a qué "se" pertenece?


  • Se notificó solo a los periodistas de ese diario.
  • No se conoce su pensamiento.
  • Se suspendieron momentáneamente las obras en construcción.
  • Los hermanos se asustaron con los gritos.
  • Los hermanos se asustaron, atacándose.


    Noelia Barroso envío este fragmento de una noticia para seguir pensando en los "se".

    Por estos días, Washington se encuentra trabajando en la nueva película de Robert Zemeckis, “Flight” y se espera que se pronuncie sobre su presencia al proyecto en los próximos días.


    “Se” y “te” en frases habituales
    Se la mandó: haciendo referencia  a que sobrepasó los límites.
    Se comen el abuso: haciendo referencia a una exigencia no esperada.
    ¡Se mató! Y siguió caminando.
    Acá se arma: haciendo referencia a que va ocurrir un problema.
    Te parto: haciendo referencia a que la persona le gusta.
    Ninguna se la banca: haciendo referencia a que invitó a una pelea y nadie aceptó.
    Es un aporte de…Néstor Amieva

    martes, 16 de agosto de 2011

    LOS "SE", "ME"...UN DOLOR DE CABEZA

    Si nos encontramos con una oración como esta:

    Mercedes se casó con Francisco.

    Diríamos que “se” forma parte del verbo o bien que es un signo de cuasi reflejo. 


    Sin embargo a la literatura le gusta transgredir los principios de la gramática para lograr la extrañeza; te invito a leer esta poesía y a pensar qué adviertes de raro…hablando de gramática, por supuesto.

    Susana Thénon – Canto Nupcial (título provisorio)

    Me he casado
    me he casado conmigo
    me he dado el sí
    un sí que tardó años en llegar
    años de sufrimientos indecibles
    de llorar con la lluvia
    de encerrarme en la pieza
    porque yo -el gran amor de mi existencia-
    no me llamaba
    no me escribía
    no me visitaba
    y a veces
    cuando juntaba yo el coraje de llamarme
    para decirme: hola ¿estoy bien?
    yo me hacía negar

    llegué incluso a inscribirme en una lista de clavos
    a los que no quería conectarme
    porque daban la lata
    porque me perseguían
    porque me acorralaban
    porque me reventaban

    al final ni disimulaba yo
    cuando yo me requería

    me daba a entender
    finamente
    que me tenía podrida

    y una vez dejé de llamarme 
    y dejé de llamarme
    y pasó tanto tiempo que me extrañé
    entonces dije
    ¿cuánto hace que no me llamo?
    añares
    debe de hacer añares
    y me llamé y atendí yo y no podía creerlo
    porque aunque parezca mentira
    no había cicatrizado
    solo me había ido en sangre
    entonces me dije: hola ¿soy yo?
    soy yo, me dije, y añadí:
    hace muchísimo que no sabemos nada
    yo de mí, ni mí de yo
    ¿quiero venir a casa?

    sí, dije yo

    y volvimos a encontrarnos
    con paz

    yo me sentía bien junto conmigo
    igual que yo
    que me sentía bien junto conmigo
    y así
    de un día para el otro
    me casé y me casé
    y estoy junto
    y ni la muerte puede separarme


    El poema de Susana Thénon “Canto Nupcial” causa un efecto de total incertidumbre en el lector. En el primer verso todo parece estar dentro del orden lógico, el yo lírico dice “haberse casado”. Sin embargo, ya en el segundo aparece el problema para el lector. ¿Cómo puede un sujeto casarse consigo mismo? Evidentemente no podemos otorgarle a este verso el significado más obvio o el que nos arrojaría un diccionario si fuéramos a buscar la definición de “casar” (“contraer matrimonio”) ya que para que esta acción sea posible son necesarias, dos personas. No obstante el yo lírico sigue aludiendo a esto, expresa hasta “haberse dado el sí” y continúa comentando que no fue fácil ya que tuvo que esperar, sufrir, llorar, estar encerrado. Toda esta situación por causa de “yo que aparece enunciado en el octavo verso (“porque yo- el gran amor de mi existencia”). Aquí se presenta un quiebre en el poema porque anteriormente cuando el yo lírico se refería a sí mismo lo hacía a través del pronombre “me” y ahora confunde al lector utilizando el pronombre“yo”. Podríamos decir entonces en esta primera instancia que o bien, se produjo undesdoblamiento del sujeto que enuncia el poema (repitiéndose como destinador y destinatario de sus acciones) o un alejamiento, un distanciamiento por parte del yo lírico del pronombre “yo” (es decir, cuando exprese que “yo” es el “gran amor de su existencia” y que “no me llamaba”, no se refiera a sí mismo, sino que sea una persona “X”, “Juan”, “Pedro”, otro, el que realiza el acto pero que es enunciado por el pronombre “yo”).

    Si en la primera estrofa tomamos la hipótesis del alejamiento, el yo lírico evoca ese pasado en el que se encontraba separado “me” de “yo”. No había comunicación, “no se llamaban”, “no se escribían” y “no se visitaban”. Ni cuando tomaban el valor para hacerlo lo lograban, ya que no admitían el conflicto entre ambos. El problema se hizo tan grande que, como declara en la segunda estrofa, “me” se “inscribió en una lista de clavos”, es decir, se anotó en una serie larga de problemas, de actividades engorrosas, con las que no quería tener contacto porque “daban la lata”, o en otras palabras, apabullaban a “me” con tanto palabrerío, lo acosaban, lo acorralaban, lo incomodaban, lo hostigaban, hasta que llegaba a estallar, a resquebrajarse, a desintegrarse. Por lo tanto no podía esconder que “requería” a “yo”, que necesitaba volver a él. Sin embargo vacilaba, tanto que como manifiesta en la cuarta estrofa “me tenía podrida”.

    Aquí hay un detalle interesante para notar: el signo de femineidad en el adjetivo “podrida”. Esto trae más dudas al lector, ya que además de aparecer desdoblado el yo lírico, ahora es de género femenino y tiende a confundirse con la autora del poema, Susana Thénon. La gran pregunta es:¿Quién habla en el poema? ¿“yo”, “me”, “el yo lírico”, Susana Thénon?

    En la quinta estrofa el yo lírico revela haberse separado alguna vez definitivamente, pero extrañó a“yo”, “me”, a su otra parte y decidió llamarse/lo y volver a comunicarse. Allí se sorprende de que el problema no había cicatrizado, es decir, esa herida, ese distanciamiento entre los dos no se había cerrado, no había muerto, sólo era una fuerte hemorragia, “se había ido” (había llegado muy cerca de la muerte) pero todavía seguía fluyendo. Por eso en el duodécimo verso hay llamado, hay comunicación, conexión, entre las dos partes e invitación al reencuentro, un “sí” como respuesta a la invitación y un nuevo cambio.

    En este momento, en la última estrofa,  “yo” y “me” conforman un “conmigo”. Y no son más“yo” y “me”, sino “yo” y “yo” (“yo me sentía bien igual que yo”), o “me” y “me” (“me casé yme casé”) demostrando de esta manera que las dos partes, o estos dos sujetos que conformaban al yo lírico (si nos quedamos con la idea de que hay un desdoblamiento), al menos ahora se parecen, tienen la misma forma, han llegado a un acuerdo para constituir un “estoy junto”. Su unión ha conformado una identidad, una personalidad, que a diferencia de cualquier enlace matrimonial no puede dividirse ni desarticularse por ninguna causa. En el momento de enunciación el yo lírico es único, con sus convicciones, ideas, carácter y estilo, pero sobre todo seguro, estable, sólido, firme, sea la persona que sea.

    Agradezco a Samy, quien fue mi alumna en la escuela secundaria, y me regaló siempre sus mejores palabras.


    El poema Canto nupcial parece relatar una típica relación de amor, con sus encuentros y desencuentros (en todo caso sería desencuentros primero y un encuentro final con el que culmina). Pero, ¿qué particularidad tiene este texto? Sin duda con la primera lectura percibiremos algo extraño: todo parece referirse, como típicamente sucede, a dos personas, que sin embargo aparecen como “yo” y “yo”, cada una con todos los pronombres que a ellas se relacionan (conmigo, mi, mí, me).
    Esto genera un gran problema: no sabemos cuál de esos yo  es el que hace cada cosa, cuál insiste y cuál se niega, cuál es el que a fin de cuentas vuelve a intentar recuperar toda la relación y lo logra. Quizás lo que tenemos que preguntarnos es si resulta realmente importante identificar, separar, a cada uno de esos yo ¿No iría acaso eso contra la lógica del poema? Porque si hay un camino dibujado en él, es justamente ése, el del encuentro de estos yo en una unidad que ha sido rota y que se recupera. Y quizás por eso sea que se usa esta forma del yo y yojugando con la idea de ser dos y ser uno, siendo dos primeras personas. Justamente allí aparece la función poética, donde el uso normal se rompe.
     ¿Dónde radica esta ruptura? En que nosotros estamos acostumbrados a hablar desde una primera persona (1º), a otra (2º), sobre otra (3º) (Yo te hablo a vos sobre él) En cambio en este poema una 1º persona nos está hablando (como lectores ocuparíamos la 2º persona implícita) sobre otra 1º persona, en un giro que vuelve sobre sí misma y dota a todo el poema de un efecto de extrañeza, humor y reflexividad. (¿Y por qué no de reflexión sobre lo que significa “casarse” con uno mismo?)
     El poema pretende imitar el funcionamiento de la norma y de las reglas, y las cumple ya que todos los pronombres son de la primera persona, e incluso todos los verbos están conjugados en 1º persona;  no es que “yo” sea un nombre para otra persona (una 3º) como sucede en textos con mecanismos similares pero que utilizan la 3º persona para el desdoblamiento del yo, por ejemplo “Yo y conmigo” de E.G. Kieffer: “conmigo no siempre se llevademasiado bien con yo” “Ni siquiera sé si esta autobiografía le escribe yo o si la escribeconmigo”. En Canto nupcial  efectivamente es otra 1º persona sobre la que se habla, la misma que habla (o al menos una parte de ella que se ha alejado y que ahora vuelve). No encontramos un uso equivocado ni incoherente de la gramática: sólo extraño. Y es por ese extrañamiento justamente que este texto es literario.
    Conjugando la manipulación de categorías gramaticales y con la parodia de una relación amorosa tradicional, se tematiza los tipos de relación que cada uno mantiene consigo mismo y la multiplicidad interior. Es destacable cómo el poema en ningún momento toma un tono moralista ni didáctico. Podemos decir que en este poema no hay ninguna moraleja, pero sí que, tras su lectura queda una enseñanza. ¿Pero lo que nos produce como lectores sería lo mismo si esa enseñanza se trasmite con palabras comunes, algo así como “Sobre todas las cosas hay que encontrarse, aceptarse y comprometerse con uno mismo”? Yo creo que no, hay cierto placer en lo sugerido que es más efectivo que lo transparente. Por otro lado quizás sin atender a los detalles formales igual se percibiría un efecto cómico y de extrañeza que no sabríamos bien a qué adjudicar, pero si somos capaces de pensar cómo y desde dónde se produce ese resultado, porqué nos llama tanto la atención, podremos captarlo en toda su dimensión,  y así el resultado será más profundo, y por todas las relaciones que se pueden generar entre forma y contenidos, más rico.